viernes, 19 de octubre de 2012

Strongyloides




  MORFOLOGIA

Este parásito facultativo tiene cuerpo filiforme, esófago recto y extremo posterior aguzado. La hembra parásita mide 2 mm de longitud.

Los huevos inmersos en la submucosa del intestino delgado son ovalados y miden alrededor de 50 µm de longitud.

Las hembras y machos de vida libre presentan bulbo esofágico evidente; la primera mide 1 mm de longitud.

Las larvas filariformes, formas infectantes, miden alrededor de 600 µm de longitud, tienen esófago recto y extremo posterior ligeramente bifurcado, en tanto que las larvas rabditoides, formas diagnósticas, tienen menor tamaño y bulbo esofágico prominente.
LARVA RABDITIFORME
(Strongyloides stercolaris)
LARVA FILARIFORME
(Strongyloides stercolaris)

 

CICLO BIOLOGICO



Las larvas rabditoides (eliminadas en heces fecales) sufren 2 mudas y se transforman en larvas filariformes (L3), infectantes (ciclo directo), que penetran la piel intacta o mucosas, dando lugar, en la mayoría de los casos, después de migración por tejidos y su instalación en duodeno y yeyuno proximal, a una enfermedad benigna, crónica. Las hembras se introducen en la submucosa y producen cantidades irregulares y escasas de huevos (por partenogénesis mitótica), los cuales eclosionan rápidamente y liberan larvas rabditoides que son eliminadas con las heces fecales; si estas larvas caen en suelos húmedos y sombreados (fecalismo al ras del suelo) maduran como formas adultas dimórficas (hembras y machos) de vida libre, con potencial de desarrollo en larvas filariformes infectantes (ciclo indirecto)
Algunas larvas rabditoides se transforman en la forma invasiva (larva filariforme) en intestino grueso, penetran por la mucosa - auto infección interna - y repiten el ciclo en el mismo hospedero. En ocasiones se presenta autoinfección externa, asociada a la penetración de larvas filariformes a través de la región perianal, con migración subcutánea de estas formas - larva currens - y posterior migración pulmonar, que finaliza con el ingreso de las formas juveniles a tracto digestivo.
PATOGENICIDAD

Las larvas causan traumatismo, daños mecánicos e inflamatorios en la piel, mucosa intestinal y pulmón en su tránsito por estos órganos.
Factores de riesgo. La infección se adquiere al caminar descalzo, lo cual permite que la larva filariforme pueda penetrar la piel. Esto explica porqué algunas personas se pueden contaminar en zonas donde es raro el parásito21. A las tasas de prevalencia las influyen las condiciones socio económicas y el método de demostración que se utilice. Los perros y los gatos se pueden infectar, pero la transmisión de animales a humanos o de animal al medio ambiente al humano se considera rara.
El nemátodo puede persistir por varios años después de haber adquirido la infección, por su capacidad de reproducción en el ser humano.

 DIAGNOSTICO CLINICO

Existen diversos métodos para evaluar esta infección:
Laboratorio general. En el hemograma se puede observar eosinofilia, que es común en la infección crónica. Como este aumento de los eosinófilos presenta fluctuaciones en el tiempo, no se recomienda como única medida de seguimiento después de la terapia. La eosinofilia disminuye en los individuos que son tratados61 y en los que sufren la forma diseminada, en quienes se constituye en un factor de mal pronóstico28,37. Cuando exista esta alteración hematológica se recomienda buscar el parásito.
Coprológico. Como se sabe que en una infección moderada hay menos de 25 larvas por cada gramo de heces36, las sensibilidades de uno, tres y siete coprológicos son de 30%, 50% y 100% respectivamente, lo cual hace de este examen algo muy poco práctico.
Método de concentración. El método clásico es el formol-éter de Ritchie, en el que se observan las larvas en el sedimento.
Método de separación de larvas. Se describen dos formas de hacerlo: la prueba de Baermann y la de Harada Mori.


TRATAMIENTO

La ivermectina es el fármaco de elección. 
Alternativamente puede emplearse albendazol. La frecuencia de recaídas requiere del seguimiento clínico y radiológico de los pacientes, así como el monitoreo cuidadoso de pacientes inmunodeprimidos.













PREVENCIÓN

¥ Por la forma como se infecta el hombre es muy importante el uso de zapatos, especialmente en zonas endémicas7.
¥ Todos los pacientes que van a ser sometidos a inmunosupresión, los que tienen alguna enfermedad que los pueda predisponer, y la presencia de eosinofilia se deben evaluar para la presencia de este nemátodo.
¥ Se debe educar al médico para que sospeche la presencia de la enfermedad.















FUENTES DE INFORMACION: